Un fuerte aplauso para Yelimar. (Peripecias de un venezolano en Buenos Aires)
POR GUSTAVO VALLE
Cuando llegué en el 2005 había muy pocos venezolanos en Buenos Aires. A excepción de Grecia Colmenares y Catherine Fulop, empujadas a este sur austral gracias a sus protagónicos en Topacio (la salvaje niña ciega, abandonada al nacer) y Abigail (la caprichosa hija única de un acaudalado hombre de negocios)…